Una firma de joyas se ha convertido en un referente en las redes sociales
María Pascual, una joven barcelonesa que tiene ubicado su estudio en el barrio de Gracia, se ha forjado un nombre entre las mejores influencers como María Pombo, Dulceida, Aida Domenech o Laura Escanes y sin ni siquiera necesitar, como ocurre con otras marcas, pagar para que luzcan sus piezas. Es algo natural, más relacionado con identificarse con la misma filosofía.
El emprendimiento clave para el futuro
Maria Pascual se ha formado en la prestigiosa Central Saint Martins y en la actualidad su incipiente empresa incluso ha apostado por estar con un evento de venta en el metaverso con una colección híbrida, aunque reconoce que es un mundo que presenta aún limitaciones tecnológicas. Pero nadie le ha regalado nada. Las primeras piezas las iba vendiendo en mercadillos. Hoy en día sus collares, pulseras, pendientes o anillos tienen ya varias colecciones que han llegado al panorama internacional a través por ejemplo de Collage Vintage. Una muestra es el collar de cuerno que luce en sus redes sociales la influencer californiana Sincerely Jules. De hecho, el mercado americano está en la lista de objetivos de esta marca.
Una firma de cabecera
Las cadenas de María Pascual van con todo, y es que quedan bien con cualquier look y eso es un punto muy importante a su favor. Los colgantes son algo fundamental. Destacan por ejemplo las cadenas que llevan una medalla con el signo del zodiaco en un diseño bañado en oro muy original, permitiendo que se convierta en el mejor amuleto y que se pueda lucir en infinidad de ocasiones. Y es que se busca que las piezas tengan un significado con el que identificarse y además que sean atemporales, con lo que la inversión es doblemente rentable.
Un negocio que no puede ser más próspero
Su concepto de la joyería es un éxito, porque el resto de piezas también tienen una mezcla entre glamour y sencillez que gusta. Los finos anillos coronados con piezas de color logran un diseño sofisticado y elegante que permite la combinación con diferentes tonos en la ropa. Y es que María es una mujer joven, real, comprometida, emprendedora y muy creativa. La marca representa a esa nueva hornada de joyeros españoles, que se han hecho ya su hueco en el mundo de la joya y a la vez en las redes sociales gracias a las influencers que asumen que llevar una de sus piezas es un acierto seguro que no pasa desapercibido.
En la pequeña empresa, por su parte, sienten que tienen que responder con un fuerte compromiso con quienes apuestan por sus joyas. De hecho, con un perfil poco usual de atención súper personalizada, no quieren ser un clon de otras empresas y aunque crezca la marca quieren seguir así con esa atención al cliente tan personalizada.
Cumpliendo su sueño
Las joyas de María Pascual están entre las preferidas de todas las influencers. Han logrado verse a sí mismas (en un equipo formado por mujeres) como una pequeña revolución, y es que la marca no ha necesitado entrar en el juego del intercambio de publicidad o en pagar para que sus piezas aparezcan. Eso dice mucho de sus diseños, los cuales por cierto se pueden lucir en infinidad de ocasiones porque son duraderos, pero también porque son muy versátiles y la calidad es máxima.
Lo cierto es que se trata de ese tipo de piezas que las ves y las quieres, y su compra está al alcance de todos los bolsillos. Vende todo tipo de joyas, su última colección es un placer para los sentidos con estilos diferentes; así que siempre hay algo para cada mujer.